Denisse Rosana Fernández Benítez, perteneciente a la etnia Nivacle y oriunda de la comunidad Laguna Escalante, zona General Díaz, culminó la carrera de Enfermería en la Facultad de Enfermería y Obstetricia de la Universidad Nacional de Asunción (FENOB-UNA), el pasado viernes 5 de diciembre del 2025.
Defendió su trabajo de investigación titulado “VIVENCIA DE MADRES ACERCA DEL CUIDADO BRINDADO AL NIÑO PARA FOMENTAR LA SALUD EMOCIONAL. LAGUNA ESCALANTE. GENERAL DÍAZ. BOQUERÓN – PARAGUAY 2025.”
La joven accedió a la educación universitaria gracias al convenio establecido entre la institución y el Instituto Paraguayo del Indígena (INDI), que posibilita el ingreso de estudiantes provenientes de pueblos originarios a la formación profesional en salud.


Vocación heredada
Denisse comenta que su motivación para estudiar Enfermería surgió dentro de su propia familia. “Decidí estudiar enfermería porque es algo que me inculcó mi madre, que es mi abuela pero es como mi mamá. Ella es enfermera y ya se jubiló. Me motivó a seguir la carrera y me gustó”, relató con emoción.
Actualmente, en su comunidad existen enfermeros y una licenciada, pero ella considera importante que más jóvenes se formen para fortalecer la atención de salud indígena.
Sacrificios lejos de casa
Al ingresar a la carrera, Denisse debió mudarse definitivamente a la capital. “Desde el primer día que me inscribí en la facultad, me quedé. Solía irme al Chaco solo a fin de año porque es costoso el pasaje”, explicó, señalando que pasaba meses sin regresar a su hogar.
Si bien la FENOB-UNA cuenta actualmente con un albergue para estudiantes provenientes de comunidades indígenas, no alcanzó a utilizarlo porque contaba con la posibilidad de vivir con una tía en Asunción. Sin embargo, sí fue beneficiada con el comedor universitario.
“Es algo que beneficia a los estudiantes y ayudará a que otros también puedan aprovecharlo”, destacó, valorando el apoyo social brindado por la institución.
Formación profesional sin discriminación
Durante su proceso formativo, Denisse realizó sus pasantías en diversos hospitales y servicios de salud pública. Destacó la experiencia positiva en los campos clínicos:
“Gracias a Dios estuvo bien. Sin discriminación de los compañeros y los docentes”, expresó.
La joven reconoció que su vivencia contrasta con la experiencia de otros estudiantes indígenas que han manifestado dificultades en diferentes contextos asistenciales.
Asimismo, destacó de manera especial a la Prof. Dra. Aida Maidana, a quien manifestó deberle mucho por sus enseñanzas y por la paciencia constante brindada a lo largo de la carrera.


Expectativas como nueva profesional
Denisse concluyó la carrera en 2024 y se preparaba para iniciar su trabajo de investigación; sin embargo, la enfermedad y posterior fallecimiento de su padre la obligaron a hacer una pausa. Retomó su proyecto en 2025, abocándose plenamente a concluir su proceso de tesis, incluso estando embarazada. Hoy, como Licenciada en Enfermería, espera ingresar al ámbito laboral: “Espero encontrar muy pronto un trabajo en los hospitales”, expresó.
Asimismo, manifestó su intención de regresar a su territorio: “Sí quiero volver a mi comunidad. Me gustaría trabajar allá bastante”, afirmó con convicción, reafirmando su compromiso con el acceso a la salud de los pueblos originarios.
Cabe destacar que el acceso al comedor y al albergue universitario, brindados gracias al apoyo del Estado, representa una oportunidad para que más jóvenes indígenas puedan culminar sus estudios superiores. Este acompañamiento no solo facilita su permanencia en la universidad, sino que también les permite formarse para luego regresar a sus comunidades y aportar desde su rol profesional al desarrollo local y al fortalecimiento de la atención en salud. Esta historia evidencia el compromiso de la FENOB-UNA con la formación de profesionales indígenas en el área de salud, promoviendo la participación, la inclusión y el fortalecimiento de la atención sanitaria en comunidades alejadas del país.


